La firma Pantone eligió el color rosa cuarzo como el color del año 2016, desde entonces la industria de la moda le ha concedido amplio protagonismo al rosa en general, dándonos la oportunidad de verlo en diferentes estilismos para hombres y mujeres, en variedad de tonalidades y durante las cuatro estaciones del año.

El rosa por varias décadas llevó a cuestas estereotipos que condicionaban su uso en materia de decoración e indumentaria: así el rosa era considerado como un color femenino exclusivo de las niñas, en tanto que el rosa fuerte se asoció a los objetos de plástico, adquiriendo de esta forma la connotación de ordinario. Por otro lado, el rosa en su tonalidad Barbie Pink no se constituía en un buen aliado a la hora de vestir.

Ahora bien, si nos centramos en los significados del rosa encontramos que éste es un color acogedor, que habla de ternura y que es portador de ilusión, en otras palabras, el rosa tiende a sugerir el lado bonito de las cosas, tal como lo dicta el adagio popular: “la vida color de rosa” El rosa por su composición parece desempeñar un buen papel en lo que a constitución de relaciones amistosas se refiere.

Vestir de Rosa:

1. Comunica un riesgo sutil que puede resultar atractivo y encantador, es decir, quien viste de rosa, no es disruptivo, pero se anima a explorar sin exagerar y ahí es en donde reside su encanto.
2. Resulta moderno, justamente por el boom que ha alcanzado el rosa en estos tiempos.
3. Insinúa cierto dinamismo.
4. Suele lucir muy bien en piezas de corte masculino diseñadas para mujer.
5. En exceso y saturado resulta empalagoso y tiende a bajar el status del look.

La invitación es a que tengamos en cuenta que la dosis justa de rosa resulta amable y cordial y a que cuando experimentemos esa sensación de que la vida no nos sonríe, tengamos presente que ésta siempre tiene un lado rosa y que depende de cada quien disfrutarlo y saberlo aprovechar.